miércoles, 28 de diciembre de 2022

El Dios que presentan las tres religiones monotísta no existe, como tampoco existen, ni han existido,  ninguno de los Dioses de la antiguedad.

Pero aún así esto no significa que no exista un Dios. Ya comprobado a lo largo de los años, éste Dios existente no tiene las características, que la religión judía, islámica o cristiana le ayribuyen.

No es un ser justo. No es fuente de toda razón y justcia. No es todo poderoso. No es un ser de infinita bondad. 

Pero sí es omnipresente, porque lo abarca todo, incluidos el bien y el mal.

Este dios hizo que la vida se alimente de la vida misma. No se puede vivir sin matar. No sólo los animales son sacrificados para que todos los animales se coman los unos a los otros, los vegetales también tienen su vida biológica, y también hay que matarlos para vivir. Ni aún los frutos son eximidos, ya que la vida continúa en ellos desconectados de árboles o plantas.

Los seres vivos, cualquiera sea, tienen además sentimientos, sienten el dolor y el placer, pero en la continuidad de la vida todos sacrificados.

Este es un mundo parido por el demonio, en donde el Mal se alimenta del Bien y las injustícias ocurren por el mismo sistema de existencia.

Para ser religioso y creer en el dios presentado, se debe cumplir con una de dos únicas posibilidades, o se es idiota, o se es cómplice.

Continúa en las leyes de Pardo.

 EL PARDISMO NO AMA A DIOS, LO ODIA ES EL ODIO ENCAUSADO EN DIOS, Y HACIA DIOS.  LO ODIA Y MALDICE POR HABER CREADO TANTA MALDAD, Y EL CONSE...