Así como aún hoy existe la creencia religiosa de un dios bueno, fuente de toda razón y justicia, algún día llegará el pleno conocimiento de que el dios que presenta la religión, cualquiera sea, no es bueno ni fuente de toda razón y justicia.
Esto no significa que no exista un Dios con cualidades distintas a las que nos han enseñado durante miles de años, incluyendo a todas las deidades creadas por el hombre a lo largo de la historia de la humanidad.
Es absurdo negar la existencia de Dios porque no se conoce, simplemente no se conoce. Y cuando se conozca tampoco podrá ser negado, simplemente porque se conoce.
Lo malo abunda en la realidad de nuestro mundo, tanta maldad no es azarosa, por lo tanto dios existe y es malo.
Jesucristo fue un distorcionador de la justicia. Se debe redirigir el mal a quien lo produce, y el mal es todo lo que produce un dolor injusto, cualquiera sea el tipo o quien lo ejerza, sea dios directamente o algún intermediario.
Cuando se reacondicione la Justicia Judicial, dejando de lado el derecho romano influenciado por el cristianismo, el mundo será mucho mejor.
Tarde o temprano todos serán "Pardistas" por propia convicción.